El municipio de Quetame, Cundinamarca, tiene una particularidad que lo hace especial. El contar con zona de páramo y además con diversas fuentes hídricas hace de este lugar uno de los más importantes en relación a recursos de este tipo en la región.
Sin embargo, hace poco se presentó una situación que desencadena una serie de problemáticas relacionadas principalmente con aspectos ambientales. La intervención en el Páramos Las Burras ha significado para líderes y defensores del territorio una afrenta a uno de los tesoros más grandes que tiene Quetame, pues hace poco instalaron unas cercas en zona protegida y al hacerlo realizaron una fuerte intervención en la zona. Se tumbó vegetación propia del área.
Las personas del pueblo aseveran que esta intervención fue realizada por la Concesión Vial Andina -COVIANDINA-, a pesar de no tener seguridad acerca del origen, ni mucho menos de las razones por la cual se realizó esta acción que generó daños significativos a la zona del Páramo.
Nelson Vivas, fundador de la Corporación Cabildo Verde, fue contactado debido a esta situación y desde entonces empezó a articular junto con distintas personas para “hacer ruido” y así visibilizar la situación. “El Páramo Las Burras es sumamente importante junto con el Páramo El Atravesado. Pero estas acciones lo único que hacen es afectar la flora y la fauna”, dice Vivas, quien menciona que los daños repercuten en distintos niveles. “No es solamente la tumba de vegetación, que además se sabe que la vegetación de páramo es una de mediano y pequeño porte, sino también que estas cercas pueden impedir el paso de animales en la zona”. Recientemente se han puesto los ojos en esta zona, desde el 2023 tras la avalancha que causó destrozos en la Vereda Naranjal pues hay poca atención sobre los cauces de los ríos, especialmente sobre el río Negro, cuyo taponamiento desencadenó el suceso que casi borra toda una vereda y que recientemente volvió a generar afectaciones, esta vez en la vía que comunica Villavicencio con la capital del país.
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Históricamente, este territorio ha sido violentado a nivel ambiental y es por esto que, según líderes, lideresas y activistas en defensa del territorio, es menester defenderla. Pues desde que inició el proyecto Chingaza I han estado sobreexplotando en el municipio de Quetame los recursos hídricos. “De este lugar donde están empezando a intervenir y eso afectará eventualmente zonas hídricas que pueden repercutir hasta Villavicencio, pues de esta zona nacen doce afluentes que desembocan en el Guatiquía. Por eso hay que llamar la atención y que la ciudadanía esté enterada”.
El pasado 16 de mayo se realizó una movilización que no se pudo concretar debido al estado de la vía en la que varias personas desde Villavicencio se disponían a viajar al municipio de Quetame con la intención de socializar los daños presentados en la zona de Páramo y mostrar ante algunos concejales, la alcaldesa y ciudadanía en general qué es lo que sucede y cómo estos daños pueden repercutir en un futuro cercano para el municipio que surge de agua a Cáqueza y del cual toman agua para Chingaza I, además de hablar sobre cómo la supuesta iniciativa de Chingaza II es inconstitucional e inviable para este municipio.
Próximamente, este grupo volverá a coordinar para visitar las inmediaciones de Quetame, la zona afectada, y asimismo hablar con la comunidad sobre esta problemática que surgió de repente, genera una alarma temprana y no tiene, hasta el momento, un claro responsable.
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