El pasado 3 de abril, la Arquidiócesis de Villavicencio emitió un comunicado en el que explicaba los hechos por los cuales 19 sacerdotes fueron suspendidos, al realizar supuestamente prácticas pederastas. Sin embargo, recientemente la entidad religiosa confirmó que en total, son 36 los sindicados.
En una entrevista brindada a este medio el mismo dia que se hizo público el comunicado, Carlos Villabon, encargado de comunicaciones de la Arquidiócesis de Villavicencio, informó que el 16 de marzo fueron suspendidos 15 sacerdotes de la ciudad. Esta medida se realizó siguiendo un proceso jurídico-canónico establecido por la entidad religiosa. A través de fuentes extraoficiales, se conoció que los otros 4 implicados al parecer son de municipios del Meta y Guaviare.
En las últimas horas, Caracol Radio, reveló que tras hacer un seguimiento a esta noticia, descubrió que en total, son 39 los sacerdotes. Esto se conoció gracias a que el denunciante, contó que conoció al primer sacerdote que lo abusó cuando tenía 13 años, “este lo vio vulnerable y a cambio de mercados, ropa y dinero comenzó a abusarlo sexualmente. Cuando, al parecer, ‘se cansó’ del joven, le pidió que le llevara un casete a otro sacerdote. Se repetía la misma historia, el cura estaba un tiempo con el muchacho, conocía a otro y se lo enviaba a otro sacerdote con alguna otra excusa. Así le pasó desde sus 13 años hasta su vida adulta”, se lee en el portal web del medio de comunicación.
Los regalos de los curas a cambio de los abusos sexuales, eran al parecer, financiados con recursos de las parroquias de Villavicencio. Además, el denunciante, mencionó que como él, había decenas de niños y adolescentes que estos sacerdotes se intercambiaban. Incluso algunos, con el tiempo, se convirtieron en parejas estables de sacerdotes y eran presentados ante la comunidad como primos, sobrinos o ahijados.
Según la información de Caracol Radio, monseñor Óscar Urbina, quien es arzobispo de Villavicencio y presidente de la Conferencia Episcopal Colombiana, fue tomado por sorpresa por la Fiscalía en las oficias de la Arquidiócesis cuando la entidad judicial incautó el Archivo Secreto en el que está recopilada la trayectoria y las denuncias contra los sacerdotes de esa arquidiócesis.
Intentamos comunicarnos nuevamente con Carlos Villabon, pero no fue posible obtener declaraciones de su parte, más allá del comunicado de la entidad religiosa en el que expresa su disposición a colaborar con la investigación de la Fiscalía y esclarecer los hechos, que involucran a 36 sacerdotes acusados de pederastia.
