El joven de 22 años que viajó hacia el país mexicano en búsqueda de mejores oportunidades, hoy se debate entre la vida y la muerte tras ser agredido en un partido de fútbol.
Anderson Salas es un joven de 22 años que migró hace cinco años hacia México en búsqueda de nuevas oportunidades en el fútbol profesional, abriéndose puertas fuera del país y jugando internacionalmente, hasta que el pasado seis de septiembre, fue atacado brutalmente en un partido de fútbol que se disputaba en la Conchita Texcoco Estado de México, por jugadores ajenos a su equipo.
De acuerdo a N+, medio de comunicación del país mexicano, los hechos sucedieron en las canchas de fútbol de la Conchita, cuando el jugador colombiano queda en medio del equipo rival y estos comienzan a golpearlo en la cabeza. “A pesar de que el resto de sus compañeros de equipo trataron de ayudarlo, no pudieron contener los golpes, puñetazos y patadas que propinaban”, expresó N+ a través de su cuenta oficial.
Joven futbolista quedó en coma tras ser golpeado y pateado en la cabeza por rivales en Texcoco, Edomex. No hay detenidos hasta el momento. #LasNoticiasDeFOROtv con @nataliaschzc | #SiempreEnVivo | #SiempreContigo | Sigue la señal por https://t.co/R0rtaHzqZe pic.twitter.com/K5h0NoySu0
— Foro_TV (@Foro_TV) September 9, 2023
El joven futbolista fue trasladado por el servicio de emergencia hasta el Centro Médico Quirúrgico “Santo Niño de Atocha”. “Me lo golpearon tan intensamente y brutalmente que hoy se encuentra en una clínica en coma. Mi hijo se encuentra en un país solo donde no tiene familia y me necesita”, expresó Yaqueline Salas, madre de Anderson.
Aunque el hecho es materia de investigación y se desconocen los motivos por los cuales fue atacado el joven de 22 años, se presume que fue un caso de intolerancia y posible xenofobia. “Lo único que me contestaron fue que el partido se calentó, pero por mucho que se caliente, no le van a tirar todos a una sola persona, yo siento que hay algo más detrás de todo eso… o racismo”, explicó Yaqueline.
Yaqueline Salas reside en el municipio de Mesetas en el departamento del Meta, se enteró de la noticia por medio de una llamada que le realizó un amigo de su hijo donde le explicaba lo sucedido, seguido de la urgencia de su presencia para iniciar investigaciones. “Empezaron a escribirme, enviarme videos y evidencias de lo que había pasado e inmediatamente me tocó viajar a la ciudad de Bogotá”, explicó Yaqueline.
Yaqueline viajó a Bogotá para iniciar el trámite del pasaporte porque ella no tenía el documento y por razones circunstanciales, le negaron la agilización de este. “Me dirigí a la embajada de México en Colombia donde me expresaron que no me podían ayudar, luego al Ministerio de Relaciones exteriores, donde comenté el caso, me arrodillé en busca de ayuda, y aunque se llevaron los papeles, me dijeron que me negaban la posibilidad de darme un permiso especial. También me dirigí a la Defensoría del Pueblo, pero me dijeron que en 20 días o un mes me daban respuesta”, expresó la mujer.
La madre del joven de 22 años hace un llamado para que le den celeridad al caso, ya que su hijo necesita de su acompañamiento, y la investigación que se adelanta debe ser denunciada de manera oficial por parte de un familiar. “Lo único que yo le pido a las entidades colombianas, es que se coloquen la mano en el corazón y me den la oportunidad de ir a buscar a mi hijo, que me dejen salir del país, que por favor se pongan en mi lugar y me den ese pasaporte cuanto antes; que no me nieguen estar con mi hijo y me privaticen la oportunidad de salir para rescatarlo”, concluyó Yaqueline.
¿Cómo está América Latina en materia de xenofobia?
La xenofobia es el rechazo, odio y desprecio hacia aquellas personas provenientes de naciones y culturas diferentes a las propias, es decir, extranjeros. Esta práctica se manifiesta en mayor medida a través de acciones violentas que traen como resultados delitos.
Según el Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo – PNUD, América Latina y el Caribe pasaron de hospedar a siete millones de personas migrantes en 1990 a tener una población inmigrante de casi 15 millones en 2020, siendo la región del mundo que más creció en términos de movilidad humana.
De acuerdo a cifras arrojadas por el Portal de Datos sobre Migración, se estima que había en el mundo aproximadamente 281 millones de migrantes internacionales: 15% menores de 20 años, 73% en edad de trabajar y 12% de 65 años o más, correspondiendo 58.7 millones en América del Norte, 86.7 millones en Europa, 85,6 millones en Asia, 14.8 millones en América Latina y el Caribe, 25.4 millones en África y 9.4 millones en Oceanía.
La movilización masiva que se ha experimentado en los últimos años ha ocasionado grandes presiones socioeconómicas produciendo prácticas xenofóbicas en los países receptores, convirtiendo a los migrantes en objetivos de discriminación, marginación y explotación. “Se necesita un enfoque de derechos humanos de la gobernanza mundial de la migración para garantizar la protección de los derechos humanos de todos los migrantes y sus familias”, expresó el portal web de las Naciones Unidas.
