“Hubo una conducta celosa de Paul Arango en relación con la víctima”, señaló el fiscal a cargo del caso.
Ana María Castro, la joven de 21 años de edad, que estudió para desempeñarse como auxiliar de enfermería y quien, además, había realizado un semestre de psicología, salió la noche del 4 de marzo del 2020, a un bar ubicado en el norte de Bogotá para encontrase con un grupo de amigos. Horas después, en la calle 80 fue encontrada con graves lesiones y trasladada al hospital Simón Bolívar de Bogotá donde falleció por un trauma craneoencefálico.
Los implicados en este feminicidio son Julián Ortegón, Mateo Reyes y Paul Naranjo, quienes salieron en una camioneta marca Kía color negro, del Bar Cantina Plaza México en compañía de la joven Ana María.
Según el fiscal Gerardo Ariza, la joven habría sido “golpeada al interior de la camioneta y posteriormente arrojada en vía pública donde sufre un politraumatismo”, es por esto que se ordenó la captura de Julián Ortegón el 22 de enero del presente año y la de Paul Naranjo, este último habría manifestado que se entregaría a las autoridades en los días posteriores, quien no cumplió con lo expresado. Tomando la Fiscalía esta acción como, una burla a la justicia y a la sociedad.
«Sobre la 80 llegando antes del puente a la Boyacá botaron a una chica de un carro y está botando mucha sangre, está ahí acostada», relató uno de los testigos.
Es por esto que, el ente investigador hizo válida la captura de Paul Naranjo por el delito de feminicidio agravado, por su presunta participación en los hechos ocurridos la madrugada del 5 de marzo de 2020.
Se han presentado alrededor de tres testigos que confirman que la joven Ana María fue expulsada del vehículo en movimiento. Un testigo ocular llamó a la línea de emergencia (123) a reportar el caso “sobre la 80 llegando antes del puente a la Boyacá botaron a una chica de un carro y está botando mucha sangre, está ahí acostada”, aseguró. A estas declaraciones la defensa de Paul Naranja, dijo tener un video que comprueba que Ana María y Mateo Reyes se bajaron del vehículo tiempo antes de que se realizara esta llamada.
“Hubo una conducta celosa de Paul Arango en relación con la víctima” (…) “ya que, se molestó cuando ella bailó y se besó con un sujeto en un bar y al interior del vehículo”, así lo manifestó el fiscal Gerardo Ariza, tras haber evaluado el material probatorio, refiriéndose a un chat que daría cuenta del comportamiento machista del implicado, y tomando estas pruebas como fundamentales para la tipificación del delito de femicidio agravado.
Por su parte, John Cadena, abogado penalista defensor de Paul Naranjo expresó que, este caso fue un accidente de tránsito y ofreció indemnizar a las víctimas con un monto aproximado de cien millones de pesos. “La familia de Paul Naranjo, a pesar de que es una familia pobre, pero… también cuando las cosas cuestan, cuando en una familia una persona está siendo sindicada se hace un gran esfuerzo”, afirmó.
Además, este abogado defensor no esta de acuerdo con la tipificación de feminicidio agravado que le imputaron a su defendido, apelando que se debe tipificar como homicidio culposo a razón de, “¿Entonces una persona que sienta celos por una pareja que comienza a cortejar y eventualmente la señora pierde la vida es feminicidio? ¡No! Este acto que ocurrió con la señorita Ana María es intempestivo”, expresando que, para él, un femicidio en realidad es cuando: “Los hombres, las personas, que no le provean alimento a una mujer y ella muera de hambre eso es un feminicidio”.
El fiscal fue enfático en decir que el indicado ejerció un rol dominante en referencia a sus celos contra la joven Ana María, dando para la tipificación de un feminicidio agravado. Además, el ente acusador se negó a cambiar el delito a pesar de que la defensa de Paul Naranjo solicitó que se evaluara nuevamente el material probatorio y se tipificara como un homicidio culposo agravado, hecho que rebajaría la condena sustancialmente.
A la fecha aún no son claros los hechos, así mismo, las declaraciones de los implicados son distintas e inconsistentes para la Fiscalía. La defensa de Paul Naranjo manifestó que cuentan con el tiempo para demostrar la inocencia de su defendido.
“Yo espero que no cambien las cosas, que no puedan tapar esto, yo lo único que pido es justicia con la muerte de mi hija”, dijo Nidia Margot Romero, pidiendo además que, el caso de su hija no sea otro manchado por la impunidad.
