A propósito del cumpleaños de Villavicencio, la Alcaldía adelantó “jornadas de embellecimiento” que pintaron de gris algunos murales. Artistas de la ciudad denuncian censura.
Los muros de puentes y deprimidos de Villavicencio son el escenario de la lucha de discursos políticos, históricos y estéticos sobre cómo deberían ser las calles y quién puede apropiarse de ellas. Esta ciudad experimenta transformaciones en su paisaje físico y cultural que se ven plasmadas en estos espacios.
Vicio, una de las artistas de Villavicencio, expresa que “hay ciertos discursos que se han plasmado a través del muralismo que ponen en evidencia problemáticas sociales y visibilizan cosas, como el de ‘Ni perdón ni olvido’, haciendo referencia a la memoria.
La actual administración municipal decidió borrar esta pieza y en su lugar pintar un atardecer llanero el 21 de marzo. El secretario privado de la alcaldía, Darwin Castellanos, expresó frente al mensaje antes plasmados en las paredes como muestra de lo ocurrido en el marco del paro nacional que, “el resentimiento hace daño, es mejor exaltar la hermosura de nuestro llano”.
Arrancamos nuestra segunda jornada de #VillavoSiempreBella desde Fundadores con un nuevo mural de atardecer llanero. Serán tres días de embellecimiento de nuestra ciudad, mil gracias a cada Voluntario, gremios, empresas y sociedad civil que se han sumado a esta iniciativa pic.twitter.com/F025WpPgTX
— Alexander Baquero Sanabria (@AlexBaqueroS) March 20, 2024
“Lo bonito es subjetivo”
Según la artista Azul, en una publicación realizada el miércoles 27 de marzo, “la Alcaldía de Villavicencio pintó todos los muros de gris con el pretexto de embellecer la ciudad”. Por su parte, la administración sí adelantó varias “jornadas de embellecimiento” en las que se pintó de gris con flores algunas paredes de puentes. Luego, publicó en sus redes sociales que “a Villavo la bella también le estamos regalando color y amor por sus 184 años”.
Otra de las artistas que se manifestó en contra de estas jornadas de embellecimiento es Sun, quien menciona que pintaron graffitis que había realizado en lugares como la Glorieta de Postobón, en el Centro, cerca a la Institución Educativa La Salle y el Puente de La Escuadra cerca de Alkosto. “Me parece una falta de empatía y falta de conocimiento en el graffiti, ya que nos siguen marginando como si no fuese un arte igual de complejo a los demás. Al borrar los graffitis y murales y pintarlos de gris, se están censurando la libre expresión de artistas que de manera autogestionada realizan sus trabajos”.
Por su parte, Vicio, otra de las artistas de Villavicencio, coincide con las posturas anteriores y agrega que esto es debido a que “la alcaldía y la gobernación son de derecha y no han tenido conciencia sobre el arte muralista, graffiti y urbano en general”.
Según Sun, se censura el arte “porque simplemente no lo entienden o no les gusta cómo se ve, sólo quieren cosas bonitas, aunque lo bonito es subjetivo porque lo que para ellos es feo, para mí es hermoso”. Al finalizar una de las jornadas de embellecimiento, en la cuenta oficial de la Alcaldía publicó una galería fotográfica con la descripción, “A Villavo la queremos bella para su cumpleaños “.
Las ciudades limpias
Esta práctica de borrar murales y graffitis no es exclusiva de Villavicencio. En ciudades como Medellín, el Alcalde Federico Gutiérrez también borró graffitis y murales basado en el argumento de “recuperar los espacios públicos”.
Al parecer, ambos alcaldes podrían pretender emitir un discurso en el que se les vea como mandatarios que se encargan del orden y la limpieza de la ciudad. Desde el podcast Fauna Local del medio de comunicación El Armadillo, en el episodio “Recuperar la tacita de plata: La cosmética de una Medellín limpia”, se preguntan: “¿De qué o de quién se limpia a Medellín? ¿Quién decide qué es sucio, anómalo o peligroso y qué es arte?”.
Situación similar estaría pasando en Villavicencio, para Sun, “el objetivo de pintar de gris la ciudad es hacer ver, según ellos, todo más limpio y generar una sensación de seguridad ya que a su criterio el graffiti hace que la ciudad tenga una cara marginal”. Además, esta práctica no es exclusiva de la nueva administración.
La artista Vicio relata que en los últimos años tuvo inconvenientes tanto con la gobernación como con la alcaldía por graffitis que les borraron a ella y a su colectivo Ruda Osada. Les taparon graffitis que hicieron en la ciclorruta de la avenida 40, en el puente que comunica al Centro Comercial Viva con el Sena, en el Parque Central. También señalan que les taparon piezas artísticas que contaban con autorización. “Nos tomamos espacios con permisos, no era ilegal, pero nos los tapaban. No había conciencia de que es del movimiento social, sino que era simplemente taparlos porque no tiene mensajes que les interesen”.
Desde El Cuarto Mosquetero le hemos hecho seguimiento a esta situación, ya que en el 2021 y 2022 se presentaron denuncias por la censura de murales con mensajes del movimiento social y feminista de Villavicencio.
La Alcaldía embellecedora
La Corporación Cultural de Villavicencio -Corcumvi-, la dependencia de la Alcaldía encargada de temas culturales, citó para el 27 de enero del presente año, a 19 artistas, grafiteros y graffiteras, a una reunión que contaría con la presencia del Alcalde Alexander Baquero. La intención plasmada en la invitación era “trabajar mancomunadamente en pro de esta bella ciudad, ya que para nosotros como entidad cultural es de suma importancia trabajar de la mano con sectores tan importantes como al que ustedes pertenecen”.
Para Zokope, uno de los artistas perteneciente a la Mesa de Graffiti de Villavicencio, fue extraño que no los dejaran entrar con sus celulares a la reunión. “Como sector nos sentimos perseguidos. Pudo haber sido una forma de individualizarnos, tener nuestros nombres, nuestras caras. Se vanagloriaron de establecer un diálogo que no existió”.
Según Zokope la administración no volvió a convocar a la Mesa del Graffiti y cuando vieron que se taparon los murales, dieron por entendido que los querían conocer, pero que no querían llevar a cabo los procesos de manera articulada.
Por su parte, Lucila Gómez, directora de Corcumvi, afirma que sí se siguen realizando reuniones con este sector, así como con demás sectores artísticos de la ciudad y que incluso hay quienes hacen graffiti y han participado en las jornadas de embellecimiento. Frente a esto, Zokope afirma que ninguno de sus compañeros y compañeras han vuelto a tener vínculos con la alcaldía.
Las artistas y el artista coinciden en el hecho de la “Alcaldía censura la memoria colectiva de la ciudad”. Zokope recuerda que cuando se realizaron algunos de estos graffitis durante el paro nacional “la gente nos apoyó con donaciones, alimento, pintura. Hay muchas personas que se identifican con esas consignas que estaban pintadas”.
Por su parte, manifiestan que van a seguir reclamando los espacios donde han sufrido la censura, pintando. “La gente pasa en bus y ve, el arte es político, diverso, revolucionario, da a conocer discursos, posturas de las personas. No hay que pagar para ver la galería de las calles. El espacio público hay que tomarlo y el espacio público no es de las instituciones”, concluye Vicio.
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