Ser mujer es luchar por su libertad

Por: Astrid Lorena Ortíz

Siendo 8 de marzo pero además el día internacional de la mujer, es el punto de partida para conocer el por qué y la importancia que hay en torno a esta fecha histórica.

Y es que todo no se debe a un simple capricho de la Organización de las naciones Unidas (ONU) para reconocer a la mujer, sino que se debe más bien a la valoración y al reconocimiento que se realiza a las luchas liberadas por las mujeres en el siglo XX, el  que hoy se conmemore el día internacional de la mujer.

En específico un hecho transcendental a nivel social, impulsó a que la (ONU) declarara el 8 de marzo como día internacional de la mujer, y este suceso se desarrolló en el marco de una gran movilización que realizaron alrededor de 40.000 mujeres trabajadoras de las industrias, en el año 1908 en Nueva York en el mes de marzo.

La muerte de 146 mujeres en un incendio al interior de la fábrica textiles donde laboraban, a causa de que los dueños las encerraron para que no se unieran a la marcha que estaba gestándose en las calles, es un hecho que nos hace pensar que este más que un día de celebración, es un día en donde se conmemora las luchas, la vida y la libertad.

 Las luchas, la vida y la libertad que les fue arrebata a estas mujeres hace más de 108 años y las cuales para pena de nuestras sociedades siguen siéndoles arrancadas de sus entrañas a miles de mujeres, niñas y adolescentes en nuestro país y el planeta.

Para este día, la premisa de muchas mujeres es: ¡No queremos más flores y regalos materiales, para que al otro día nos olviden y/o subordinen! ¡Queremos libertar, queremos amor, queremos comprensión, queremos que nos amen con pasión pero sobretodo que nos respeten con fervor y por convicción! ¡Queremos el abatimiento de todas las formas de violencia hacia nosotras y lo propiciaremos nosotras mismas! ¡Queremos que se acabe el discurso de la estética y los canones de belleza que nos cosifican y que imposibilitan ser mujeres en el sentido de la palabra!

¡Queremos su apoyo, moral en todas nuestras ideas pero no necesitamos su aprobación! ¡Queremos no su impulso, pero si su ánimo hombres, para no desistir de nuestra labor de desligar apegos de todo tipo sobre ustedes y la sociedad patriarcal! ¡Solo así seremos libres! ¡Solo así podremos vivir con dignidad y mirar atrás sin tanto dolor y sin tanta vergüenza a los rostros de estas mujeres que viven en nuestras mentes, que tuvieron que dar su vida por una libertar no solo laboral sino social y económica! ¡Que para trabajar tuvieron que romper todos los esquemas! ¡Vamos por nuestro verdadero lugar en la sociedad y vamos a ser las mujeres quienes escribamos la historia!

Estas mujeres sin miedo de empuñar las banderas de la libertad, sin miedo de alzar sus voces a los cielos y a los vientos para que estos lleven consigo en su viaje sus ideas y sus luchas, están en todos los lugares, están en nuestras casas, en nuestras escuelas, en nuestros barrios, están y vivirán por siempre.

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