Por: José Carvajal*
Hace muchos, pero muchos días, escuche una voz lejana y fría; llamando a la calma, dirigió tres frases carentes de contenido, pero llenas de la mayor cantidad de cinismo que su vestimenta e identificación le permitió; “Que hacen aquí, deberían estar estudiando, aquí solo aprenden mañas y vicios”; y aquí quisiera explicar; en ese preciso momento me encontraba demostrando la gran cantidad de cretinismos que la sociedad ha pregonado, ponía en práctica la teoría y la refutaba, pero, quizás su lugar frente a mí le imposibilito ver que aprendía, si así lo quiere llamar.
Entendí que todos, al vivir, modificamos con acciones concretas la cultura; consientes o no de esto, estamos como jóvenes respondiendo al entorno, la cuestión está en saber a quién beneficiamos, ¿aportamos al rico y poderoso, o negamos sus actuaciones?, en este momento, le habla un joven que entiende su papel en el país y que hoy lo invita a criticar su entorno.
Caballero agente de la moral y las buenas costumbres, quienes impulsamos la manifestación enseñamos un nuevo concepto de desarrollo, “mostramos que podemos vivir comunitariamente”; construimos y teorizamos en la práctica, recuerde mi respuesta, “Yo no vivo solo en este país, entienda que sin importar más cosas, debemos trabajar juntos” por favor, entienda que si me quedo quieto seguiremos respirando el mismo aire contaminado; no compremos el día tras día, pagando con nuestra vida digna; así que, “Qué hace ahí, debería estar creando con nosotros, aquí se aprende a vivir bien y a pensar en los demás”.
*José Carval, abogado en proceso de formación y lider ambiental en el departamento del Huila
*Opinión y responsabilidad del autor de la columna, más no de El Cuarto Mosquetero, medio de comunicación alternativo y popular que se propone servir a las comunidades y movimientos sociales en el Meta y Colombia.
