Habitantes de zonas rurales de Villavicencio ahora cuentan con transporte durante la cuarentena

Bajo la iniciativa de Carolina Santiago, edil del Corregimiento 7 de Villavicencio, en articulación con presidentes de Juntas de Acción Comunal y con el apoyo de la Fuerza Aérea, Policía de Carabineros y la empresa NG Bussines Group, se habilitó un sistema de transporte semanal para los campesinos de ese sector.

Santiago comentó a este medio que todo empezó tras una denuncia que hizo ante la falta de atención a las zonas rurales y el peligro que corren sus habitantes dada la emergencia del COVID-19. Su inconformidad tuvo tal alcance que delegados de las entidades gubernamentales la contactaron y militarizaron la zona.

No obstante, la edil se reunió con una Mayor de la Fuerza Aérea Colombiana y le comentó una de las más grandes preocupaciones de los campesinos: el transporte. Desde ese momento, se empezó a trabajar en una estrategia para que las y los habitantes del Corregimiento 7, pudieran movilizarse hasta Villavicencio a abastecerse y realizar otras actividades fundamentales como pagar servicios públicos, cobrar subsidios, enviar y recibir giros, entre otras.

De esa manera se logró obtener el apoyo de la empresa de transporte NS Bussines Group, la cual prestó un bus de 32 personas con capacidad para 16 (solo puede ir una en cada puesto doble para mantener el aislamiento), el conductor y el combustible para esta labor también está contando con la ayuda del grupo de Carabineros de la Policía, para escoltar a las personas durante el recorrido, además de la FAC.

En necesario resaltar que, según Santiago, el servicio de la Policía de Carabineros es necesaria debido a que en estos momentos de cuarentena, la escasez de dinero y comida, se ha hecho más notable, por lo que un bus lleno de personas con provisiones ya sea monetarias y de alimentación, puede resultar un botín tentador para los amigos de lo ajeno.

La iniciativa tomó como nombre «TRUVS» Transporte Rural de Urgencias Vitales Semanal y cuenta con tres rutas organizadas de la siguiente manera:

1. Bella Suiza – Vereda Vigía – Apiay – Barcelona – Cocuy – La Cecilia
2: Vegas del Guayuriba – Santa Rosa – La Reforma – Santa Helena – Llanerita
3: Guamo – Bosco – Mi Llanito – Caños Negros

En los tres casos, el recorrido tendrá como punto de destino en la Central de Abastos de Villavicencio.

Esta estrategia, según cifras reveladas por la edil, beneficia a aproximadamente 30 o 40 personas que salen semanalmente, lo que tiene un impacto positivo en 150 familias, para un total de 400 personas beneficiadas. Esto resulta fundamental teniendo en cuenta que los residentes de esas zonas, en su mayoría, cuenta con recursos económicos limitados y al no haber transporte público, un taxi no es una opción, pues una sola carrera puede costar más de $100.000, desde la vereda más lejana.

“En el campo la gente es muy solidaria. Ellos hacen trueques, entre vecinos hacen cambios de queso por naranjas y demás insumos, dependiendo de la necesidad de cada quien”, explicó la edil, añadiendo que este tipo de actos funcionan solo en unos pocos lugares, debido a que en gran parte de las veredas, la distancia entre una finca y otra es de 500 metros o un kilómetro, por lo cual, es necesario el abastecimiento de alimento en la Central de Abastos, pues allí los campesinos pueden encontrar desde alimentos para humanos hasta alimentos para animales, importante para quienes tienen ganado vacuno, porcino o pecuario.

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