En Villavicencio es evidente la contaminación, sobretodo la referente a la acumulación de residuos. En varios de los afluentes de la ciudad, es común ver colchones, cartones, icopor, ropa e incluso muebles contaminando sus aguas y generando malos olores. Este tipo de residuos también se pueden ver sobre algunas aceras o lotes en estado de abandono.
Pero las basuras no se mantienen estáticas, muchas de ellas van a parar a las rejillas bajo las cuales funcionan las redes de alcantarillado de la ciudad, provocando afecciones para las y los villavicenses durante las épocas invernales.
Ante la necesidad de conocer el proceso de mantenimiento de este sistema subterráneo y cómo la comunidad villavicense puede aportar a su cuidado, El Cuarto Mosquetero se contactó con Juan Andrés Casteblanco, ingeniero civil en el área de alcantarillado de la EAAV, quien comentó que durante los trabajos de mantenimiento es muy común encontrar toallas higiénicas, preservativos e incluso colchones, que se supone deberían llegar al lugar correcto cuando en casa se hace una correcta disposición de los residuos sólidos.
Es durante la inspección periódica de las redes de saneamiento como parte de las tareas de mantenimiento preventivo de las tuberías para descubrir, antes de que sea demasiado tarde, pequeñas fisuras o rajas, que se puede ver la falta de educación ambiental en la ciudad. El funcionario aseguró que la labor de mantenimiento ha cobrado mayor importancia debido a la obstrucción generada por las basuras al interior del sistema de alcantarillado.
Por eso, desde la entidad, se está realizando una campaña de concientización para que las y los villavicenses no boten basura en espacios públicos, pues posteriormente estos residuos van a dar a las redes de alcantarillado obstruyendo el fluir de las aguas y generando inundaciones durante las fuertes lluvias en las principales vías de Villavicencio como las de Los Fundadores, Postobón, la Séptima Brigada, Cofrem, el Anillo Vial, entre otras. Además, estos sectores son críticos por tener una pendiente baja, lo que provoca que las aguas lluvias se estanquen en un solo lugar.
“La gente hace mal uso del servicio, y se molesta cuando uno le dice, pero es falta de cultura ciudadana”, afirmó el funcionario quien recalcó que el mantenimiento al alcantarillado se ha hecho indispensable para evitar acciones correctivas. El equipo de mantenimiento del alcantarillado trabaja de lunes a sábado pero está disponible para atender el llamado de la comunidad 24/7, según explica.
Casteblanco sabe que Villavicencio aún requiere de tiempo para que tome cultura ciudadana, pone como ejemplo a Medellín, ciudad que se caracteriza por el cuidado de sus habitantes hacia los espacios públicos. Asegura que es necesario que las y los villavicenses generen un sentido de pertenencia, se apropien de su municipio y que no continúen con el hábito de “no hacer de los problemas algo ajeno cuando alguien más lo haga”.
No obstante, la responsabilidad de cada ciudadano, va más allá de no arrojar basura en las calles, es necesario que desde cada hogar se empiece a hacer una correcta disposición de los residuos sólidos; separación en la fuente, teniendo en cuenta que los productos orgánicos pueden convertirse en fuente de abono, o por lo menos no afectar la demás basura; que hay elementos que se pueden reciclar y/o reutilizar y que esto no solo se debe hacer para evitar que las redes de alcantarillado colapsen, sino tratando de cuidar las fuentes hídricas, que representan la vida en nuestros bienes comunes.
