En tiempos de coronavirus, la imposibilidad de trabajo, obliga a algunas personas a incumplir la cuarentena debido a sus condiciones económicas saliendo a las calles a vender comida o cualquier otra clase de artículos, pues dependen del diario vivir para subsistir. Otros, dueños de pequeñas empresas, han optado por reinventarse.
Tal es el caso de Duban Cano, propietario de Tapizados Cano, quien en vista de la poca demanda que ha tenido debido a la cuarentena nacional y la poca protección de los taxistas a la hora de brindar sus servicios, creó una barrera que separa la cabina del conductor, con la de los pasajeros.
“Hay que tener en cuenta que la primera muerte por Covid-19 en Colombia, fue la del taxista en Cartagena que se contagió por transportar a dos turistas”, recordó Cano en conversación con El Cuarto Mosquetero.
El empresario, que tiene su establecimiento en el barrio Porvenir, explicó que la barrera está hecha con un marco en hierro, el cual se forra en lona y al que posteriormente se le pone un plástico transparente vulcanizado. Esto permitirá que las partículas de saliva tanto del conductor, como del pasajero, queden estancadas en el separador. El elemento además, cuenta con una pequeña abertura por la cual, se puede pasar el dinero pagado por el servicio.
Esa, argumentó Cano, es su manera de poder generar ingresos en medio de la cuarentena y su vez, aportar a la protección de los taxistas, que se ponen en riesgo a diario, debido al servicio fundamental que brindan a la sociedad.