María Alejandra Jiménez nació en La Guajira, pero actualmente está radicada en New York por razones académicas, que por supuesto, están ligadas a su más grande pasión: la música, la cual la llevó a hacerse conocer en la industria como ‘Alea’.
Desde muy joven, Alea sintió correr por sus venas el arte hecho expresión a través de la danza y la música. Con esas disciplinas, la artista le rinde homenaje a sus raíces fusionando ritmos como cumbia, vallenato y rancheras, con jazz, landó y pop, concibiendo un sonido ancestral pero a la vez moderno.
La artista incluso le ha apostado a incursionar en música con letras feministas, que buscan la emancipación de la mujer de los roles socialmente impuestos, invitándola a ‘alborotarse’ y vivir libre de prejuicios, edificando su ser con base en su propia convicción.
Su más reciente sencillo se titula Échale Sal, una canción con folklore, rap y canto que invita a celebrar las raíces latinas y habla sobre la migración; como acto de resistencia. Su nombre proviene de la cotidianidad en la cocina colombiana, pues cuando un guiso sabe insípido, se aconseja añadir sal.
Échale Sal refleja el aporte de todos y todas a las comunidades, de eso que los hace únicos y que incita a la lucha y la esperanza en medio de las dificultades que representan sobrevivir día a día como migrante, especialmente en las grandes urbes como es en su caso, New York.
El sencillo fue escrito entre Alea y su productor musical, Sinuhé Padilla. La idea surgió de una noche en el metro de New York cuando observaban a los pasajeros entre vagones ir y venir luego de arduas jornadas y a quienes les esperaba el descanso del anochecer para continuar al día siguiente con esa lucha propia por ellos/as y sus familias, una realidad que aplica en gran parte a los y las migrantes que en busca de garantizar un bienestar, se han aventurado a dejar sus hogares en tierras lejanas y desconocidas.
Con esa voz melodiosa y suave, Alea busca traspasar fronteras transmitiendo lo que representa su ser, sus raíces, sus ancestros, fungiendo como mensajera de tolerancia, amor y respeto. Aquí puede disfrutar de su canción:
