Pronto se acercan las elecciones para establecer las Juntas de Acción Comunal (JAC) en la ciudad (a menos que se decrete lo contrario por el estado de emergencia que vive el país por la propagación del coronavirus), por lo que Gustavo Basto, director de Participación Ciudadana, explicó los detalles y aclaró las dudas que suelen surgir frente a este proceso.
En la capital del llano, existen alrededor de 500.000 habitantes en 509 barrios distribuidos en ocho comunas y siete corregimientos de los cuales, hasta el momento, existen 384 JAC, así lo expuso Gustavo Basto, quien también confirmó que el 26 de abril se estarán realizando las elecciones para elegir los dignatarios en los barrios.
En este proceso, afirmó el funcionario, se busca acercar lo comunal a la academia, razón por la que se generaron convenios con diferentes universidades, en los que las personas interesadas en conocer todo lo relacionado con las JAC, podrán capacitarse en lo que se ha denominado “Escuelas de Ciudad”.
De hecho, este proyecto ya está en marcha e inició en zona rural. Basto comentó que la semana pasada se hizo presencia en la vereda Quebrada la Honda del corregimiento 3, realizando de primer momento, una formación de Liderazgo Comunitario con 30 pobladores del sector y que las siguientes capacitaciones se harán en las comunas 4, 5, 7 y 8, tratando temas de empoderamiento y liderazgo comunitario, el ABC comunal (que explica lo esencial de las JAC) y los Tribunales de Garantías. Estos últimos, afirmó el entrevistado, son relevantes porque cumplen la función de la Registraduría en una elección territorial, pero en este caso, serán tres personas de los barrios debidamente capacitadas, las encargadas de controlar todo el proceso eleccionario, pues de ellas dependerán la trasparencia de este proceso electoral.
Para ser parte de una JAC, solamente es necesario ser residente del barrio y ser mayor de 14 años, pero los menores de edad no podrán ser elegidos como presidentes de Junta hasta cumplir los 18 años, pero sí votar, aclaró el funcionario añadiendo que aunque la Ley 743 del 2002, exige estos y otros requisitos mínimos, es cada junta la que regula aspectos más precisos dentro de sus estatutos.
Así mismo, el director de Participación Ciudadana, explicó que para inscribir planchas, la Ley establece que en el último domingo de abril se deben hacer elecciones pero que 15 días antes se tiene que hacer asamblea previa para elegir el Tribunal de Garantías, es decir, el 3 de abril.
En una pequeña contextualización, Basto, remontándose a la década de los 80, comentó que cuando se pensó en construcción de las JAC por iniciativa del padre Camilo Torres, y el sociólogo Fals Borda, el criterio de estas iba encaminado un poco en lo rural y se pensaba en la articulación de la comunidad mediante una formación organizativa de los territorios para resolver problemas internos. Sin embargo, el funcionario afirmó que el objetivo original se ha trasformado para rendir beneficios a campañas políticas. “Hoy en día las Juntas de Acción Comunal se han instrumentalizado y lo que queremos es devolverle la identidad a las juntas”, puntualizó.
En cuanto al manejo del presupuesto participativo, el funcionario expresó que se han visto experiencias positivas como Nariño, Medellín y Santa Martha, lugares en los que se ha cambiado la concepción de lo que es este término, contrario a lo que sucede en Villavicencio, porque se sigue creyendo que dotar a las JAC de algunos elementos obedece a dicho concepto, lo cual es un error porque la lógica real corresponde a de que las administraciones municipales, las JAC y los ediles se articulen en pro de objetivos comunes, “No se trata de establecer un rubro para X comunidad sino de que evidenciemos como administración y como actores de territorio un problema, donde las comunidad ponga recursos y la alcaldía también, por ejemplo, la construcción de la caseta comunal”, explicó.
Finalmente, el director de Participación Ciudadana resaltó que es importante que todos participen de las JAC, porque estas son el primer escenario de articulación entre la administración municipal y las comunidades, pues como tal, los dignatarios son el vínculo para resolver las problemáticas de los barrios, de ahí que sea necesario que quienes formen parte de las juntas, cuenten con una comprensión de lectura de ciudad que dimensione las inconformidades y requerimientos de la comunidad.