La alpinista Alison Hargreaves nació el 17 de febrero de 1962 en Derbyshire (Inglaterra). Su pasión por el montañismo fue motivada por su familia, la llevaron a los Alpes austriacos en las vacaciones de 1976 y al año siguiente estuvo en Noruega en una expedición al Parque Nacional Rago Círculo Polar Ártico con sus amigas.
A los 18 años se fue de la casa de sus padres, en esta época conoció al que posteriormente sería su esposo. Jim Ballard la ayudó a incursionar en el mundo de la escalada, escena dominada ampliamente por los hombres.
Alison hizo una transición de la escalona al alpinismo. A los 24 años escaló el Himalaya, llegó a los 6.500 metros pero se retiró por las avalanchas. En 1988 se convirtió en la primera alpinista en alcanzar las seis grandes caras de los Alpes, una de ellas, embarazada de seis meses.
Hargreaves tuvo dos hijos, dividió su tiempo entre el cuidado de los niños y el alpinismo, ese doble rol la hizo objeto de críticas de personas que cuestionaban que ella prefiriera escalar que dedicarse por completo a Kate y Tom. En ese momento la familia pasaba una angustiante situación económica que hizo que Alison fuera la que proveía el dinero.
A pesar de las críticas que recibió por su condición de mujer alpinista, Alison logró ser la primera mujer en escalar el Everest sola, no usó oxígeno complementario ni ayuda de los sherpas. Esta hazaña le dio reconocimiento en el mundo de los y las alpinistas.
Anhelaba coronar las tres montañas más altas del mundo, también en el Himalaya: el K2 y el Kangchenjunga. Se lanzó por la segunda montaña más alta, logró llegar a la cima del K2 pero en el descenso se registró una fuerte tormenta. Alison desapareció junto a otros escaladores. Su muerte quedó registrada el 13 de agosto de 1995.