Durante un encuentro, lideresas y activistas del Meta plantearon una agenda para garantizar una vida en paz para las mujeres.
Recientemente, la colectiva de mujeres ‘Enredhadas por la paz, la memoria y la vida sin violencia’ reunió durante seis horas a 70 mujeres lideresas y activistas de los municipios de Villavicencio, Guamal, Lejanías, Fuentedeoro, Puerto Rico, Vista Hermosa, Restrepo, Cumaral y Mesetas con el objetivo de construir su agenda de incidencia 2021-2022, la cual busca que se reconozcan los derechos humanos de las mujeres como prioritarios y lograr una cultura de paz y reconciliación para una sociedad más justa e incluyente.
Cabe recordar que Enredhadas es una red que integra organizaciones de mujeres de diferentes procesos organizativos, sociales y comunitarios presentes en el departamento del Meta, principalmente féminas en proceso de reincorporación, víctimas del conflicto armado, campesinas, jóvenes, entre otras, así como también activistas e investigadoras en temas de paz y género.
Durante el encuentro la colectiva anunció que a través de su veeduría ciudadana, que tiene como objeto social hacer seguimiento al enfoque de género del Acuerdo de Paz en el Meta, realizará su segundo informe sobre el seguimiento a las medidas de género en dos puntos del acuerdo que esperan definir próximamente con las mujeres.
“Realizamos elección de comités de mujeres y género, de autonomía económica y de memoria, paz y reconciliación. Este tipo de escenarios son importantes porque permiten que las mujeres tengan espacios juntas para escucharse, conocerse entre ellas, discutir realidades y juntas trazar acciones para la incidencia”, le comentó Graciela Virguez, representante de la colectiva a El Cuarto Mosquetero.
Según ONU Mujeres Colombia, las mujeres, junto con sus hijas e hijos, representan la mayor parte de las poblaciones de desplazadas, refugiadas y sobrevivientes de los conflictos. Históricamente sus cuerpos han sido usados como botín de guerra a través de la violencia sexual. Pese a que existen mujeres capaces de liderar movimientos de paz e impulsar la recuperación de las comunidades después de un conflicto, casi nunca están presentes en las mesas de negociaciones de paz. Su exclusión de las labores de reconstrucción limita su acceso a las oportunidades de recuperación, de obtener justicia por las violaciones de sus derechos y de participar en las reformas de las leyes y de las instituciones públicas.
Es por eso que, durante este encuentro apoyado por la Misión de la ONU en Colombia y la Secretaría de la Mujer de Villavicencio, las mujeres socializaron la frase insignia con la que se identifican dentro de la colectiva #PorUnaPazCompletaParaLasMujeres, frase que fue objeto de discusión, análisis, pero sobre todo cargada de contenido desde la experiencia y necesidades de las mujeres en el departamento.