Tras la audiencia de descargos y señalamientos, finalmente la docente recibió respuesta por parte de dicha Corporación Universitaria.
El proceso disciplinario que fue abierto a Francy Moncada por parte de la Corporación Universitaria Minuto de Dios – Uniminuto sede Orinoquía, debido a la actividad realizada en el marco de la semana de la comunicación donde estudiantes de diferentes programas denunciaron estar siendo víctimas de acoso sexual por parte de docentes y compañeros, culminó el pasado 15 de diciembre.
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A través de un oficio emitido por Alejandro Bustamante Mejía, director de talento humano, se notificó a Francy la absolución del proceso que fue abierto en los últimos días del mes de noviembre. “Se pudo establecer que no se evidencia la comisión de falta alguna de su parte y que, en tal sentido, no se le impondrá sanción disciplinaria por los hechos que originaron el presente proceso disciplinario”, se lee en el documento adjunto.
De acuerdo con Francy, este proceso impactó su vida profesional y personal. “La universidad me responsabilizó a mí, el proceso generó un mal ambiente al interior de la universidad y mi relación con profesores/as de otros programas, y en el programa de Comunicación Social – Periodismo nadie habla del tema, del ocho de noviembre ni de las denuncias que después salieron por acoso, sin embargo, no he recibido rechazo por los directivos”, afirmó la docente a este medio.
Asimismo, manifestó de qué manera esto influyó no solo en su vida personal, sino también familiar. “Mi familia empieza a temer por mi seguridad, mi vida y mi integridad, y no solo por la mía, sino por la de mi hermana que en ese momento tenía un contrato con la universidad y también por la de mi hija; emocionalmente esto generó un shock en mi casa. Mi mamá presentó un cuadro de ansiedad”.
¿Cómo fue el proceso disciplinario y de citación?
Francy fue citada a descargos el 30 de noviembre a través de una conferencia virtual, donde la respuesta debía ser brindada dentro de los 10 días hábiles siguientes al encuentro, un tiempo estimado que fue cumplido por la universidad.
Conforme a declaraciones de la docente, fueron cuatro los cargos por los que estaba siendo juzgada: por el daño al buen nombre de la institución, por injuria y calumnia a los docentes que aparecieron en la urna; por no realizar el debido procedimiento para pedir el espacio de la Zona T, y por no efectuar el proceso con Bienestar Institucional para hacer uso de la elipse deportiva.
De acuerdo con Francy, “realmente fueron días de mucha incertidumbre porque yo esperaba la respuesta cualquiera fuera. A mí me dieron cuatro opciones de respuesta: llamado de atención, sanción, absolución o posible no renovación de contrato como consecuencia de causa justa”.
Y es que el proceso disciplinario al que fue sometida Francy, no tenía lugar. Según Alejandro Sepúlveda, integrante del Sindicato de Trabajadores y Trabajadoras de la Corporación Universitaria Minuto de Dios – SintraUniminuto, “acusarla que a partir de su ejercicio docente está motivando estas situaciones por las cuales se le llama a descargos, es una clara violación a la libertad de cátedra”.
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Tras su absolución, Francy manifiesta que la universidad brindó una respuesta sensata, sin embargo, en ningún momento fue liberada de las responsabilidades que se le imputaron. “El proceso me da una respuesta de absolución, pero no reconoce mi inocencia, lo que hace la respuesta es reconocer la inocencia de la universidad frente al tema. Yo sí sentí que se me vulneraron derechos, por lo que pasé mi caso al Comité de Convivencia Laboral de Sede”.
Se espera que la evaluación del caso de Francy por parte del Comité inicie el próximo semestre, es decir, entre la segunda y la tercera semana de enero.
Hubo celeridad frente al proceso de Francy, pero ¿qué ha ocurrido con los presuntos acosadores?
Las y los estudiantes que denunciaron públicamente a sus acosadores, aún no obtienen respuesta frente al proceso de investigación que debería estar curso, sin embargo, se aspira a que la universidad realice el debido proceso y, a su vez, brinde a la comunidad estudiantil informes del caso.
Tras los hechos presentados dentro de esta sede educativa, se espera además de celeridad en los procesos de investigación, espacios de seguridad y protección. “Aquí lo importante es garantizar unos espacios libres de violencias que incluye la violencia sexual, un espacio libre de violencias para las personas integrantes de la comunidad educativa. La idea es seguir trabajando por esta garantía”, concluyó Francy.